A mi soledad no le importa nada.

Tanta soledad que me sumerjo en un loco deseo de aniquilar mis pensamientos, Sigo anhelando poder dejar de extrañarte, me siento vacía mientras mi cuerpo se marchita sin tus caricias ni tus besos, ¡cómo te extraño!, cuanta necesidad de ti tiene mi alma, cuan obscuro es mi sueño por no poder soñarte y cuantas ansias que me embriagan de soledad por no poder amarte. Besar tu piel ya es solo un recuerdo, sentir tu sudor y bañarme en el es una fantasía, dejar de escuchar tus gemidos y suspiros mientras me haces el amor me han dejado sorda, sorda a la magnificencia que es sentirte pleno entre mi cuerpo, pleno con mis caricias. Mis labios ya no emiten sonidos más que lamentos, mi risa esta casi extinta porque siento que no te tengo, me hago la imagen de tu amor para sentirme acompañada, y cuando abro mis ojos no veo más que la misma soledad encarnada… ¡Te Necesito! Y no lo niego, aunque muchas veces por orgullo no lo demostré y lo lamento. Deseo tenerte una vez más, ansío que nuestras almas se vuelvan a encontrar, que se amen en un eterno beso para luego respirar al compas de sus corazones que se agitan con cada erizo de nuestros cuerpos, que sientan esa necesidad de comerse con tal intensidad que nos deje agotados y aun así deseando volverlo a intentar. Te necesito, necesito tu compañía, tu amor tus besos, tus susurros, tu olor, cuerpo. Te necesito integro y entero solo para mi ese es mi más profundo anhelo, no importa cuando te vayas si mientras que estés conmigo pueda sentirte aquí adentro, no importa cundo no estés si sé que me voy en tus pensamientos, no me importa más que tenerte, que me tengas…. No me importa más que tenernos.